El ministro de Asuntos Exteriores de Jordania, Ayman Safadi, pidió este domingo una investigación internacional sobre los crímenes de guerra cometidos durante el asedio militar de Israel contra la Franja de Gaza.

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En declaraciones realizadas durante una conferencia de prensa con el comisario general de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (Unrwa), Philippe Lazzarini, Safadi ha pedido que los que sean responsables de crímenes documentados deberán ser llevados ante la justicia

Por su parte, el jefe de la Unrwa, Philippe Lazzarini lamentóo durante una visita a la capital jordana, Amán, que no haya «ningún sitio seguro» para los civiles en Gaza.

«¿Adónde van a ir? no hay ningún lugar donde ir porque ningún sitio es seguro para ellos en la Franja de Gaza», ha afirmado, asegurando que «la gente no tiene más opción que regresar a ciudades destrozadas e infraestructuras nulas, incluso aquellas que pertenecen a la ONU».

Por su parte, Martin Griffiths, coordinador de asuntos humanitarios de la ONU, le dijo a Al Jazeera que la situación en Gaza no se parece a nada que haya visto durante su carrera.

“Cuando trabajadores de ayuda humanitaria con mucha, mucha experiencia, que han estado en todo tipo de lugares alrededor del mundo durante décadas, van a Gaza –para ayudar, servir, trabajar–, es traumatizante para ellos». 

«Entonces, que Dios ayude a lo que debe ser para el pueblo de Gaza. Es realmente difícil y empeora cada día”, afirmó. 

El Ministerio del Interior de Gaza ha emitido un comunicado denunciando el “asesinato por parte de Israel del director de investigaciones policiales para el centro de Gaza y su escolta mientras cumplían su deber policial esta mañana”.

El ministerio identificó al funcionario como el coronel Zaher al-Houli. Otros cuatro agentes de policía también fueron asesinados anoche por tropas israelíes en el campo de refugiados de Nuseirat, señaló el ministerio.

«Los repetidos ataques contra agentes de policía y miembros del servicio policial tienen como objetivo sembrar el caos dentro de la sociedad palestina», aseguró.

“Reiteramos que la policía es un organismo civil protegido por el derecho internacional y que el asesinato de agentes de policía es injustificado”.

En otro orden de cosas, Hamás ha asegurado que, desde la toma militar israelí del cruce de Rafah hace 13 días, el Ejército israelí ha impedido la entrada de unos 3.000 camiones de ayuda humanitaria, tanto por este cruce como por el de Kerem Shalom. 

Desde el 6 de mayo, las autoridades de la franja estiman, además, que un total de 690 heridos y enfermos tampoco han podido abandonar Gaza.

 «Esto plantea un peligro claro en medio del colapso del sistema de salud, los ataques (israelíes), la destrucción y la quema, y (amenaza con) el cierre total de hospitales», ha detallado en un comunicado oficial.

El Ejército israelí, por su parte, continúa avanzando del este al oeste de la ciudad de Rafah, donde según testigos presenciales, helicópteros militares han atacado el este de la ciudad, mientras que cazas han bombardeado el centro. 

Además, según Wafa, buques de guerra israelíes han atacado las zonas costeras del paseo marítimo de Rafah. 

En el norte de Gaza, donde este sábado el Ejército israelí amplió una orden previa de evacuación hasta Beit Lahia, se han reportado intensos bombardeos que causaron muertos, según la agencia palestina Wafa. 

También en el campamento de refugiados de Jabalia – donde Israel inició hace una semana una reofensiva terrestre y aérea que ya destrozado más de 300 viviendas – y en las proximidades del hospital Kamal Adwan.

La Agencia de la ONU para los refugiados palestinos (Unrwa) estima que unos 800.000 gazatíes, o cerca de la mitad de quienes se refugiaban en Rafah, se han visto obligados a desplazarse tras la ofensiva terrestre israelí iniciada allí el pasado 6 de mayo.
 

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